"Sputnik, mi amor" de Haruki Murakami

Título: "Sputnik, mi amor"
Autor: Haruki Murakami
Editorial: Maxi TusQuets
Año de publicación: 2002
Cantidad de páginas: 244

"En la vida de las personas hay una cosa especial que sólo puede tenerse en una época especial. Es como una pequeña llama. Las personas precavidas y con suerte la preservan con cuidado, la hacen crecer, la llevan como una antorcha que ilumine sus vidas. Pero, una vez se pierde, esa llama no puede volver a recuperarse jamás"

     Segunda lectura de Murakami y me gustó otra vez. Encontré en las situaciones planteadas y en las reflexiones de los personajes mucha filosofía sobre la vida misma. Cosas que pasan y otras que se nos pasan. Siento que Murakami no es un autor fácil, de hecho esta obra plantea la existencia de mundos paralelos, yace la presencia de lo oníroco y habla del desdoblamiento de uno mismo frente a determinados momentos de la existencia. Sin embargo, frente a lo que pueda parecer rebuscado, la narración nos va llevando y sumergiendo sutilmente dentro de estas situaciones y en mi caso no me sentí perdida. Al contrario, capté la esencia del texto, creo que hay hechos que nos marcan y a partir de ellos ya no somos los mismos.

    La novela gira en torno a tres personajes. Un profesor de primaria es el que narra la historia. Nos sumerge de entrada en el mundo de su amiga Sumire, de quien está perdidamente enamorado. A su vez, en Sumire ha nacido un intenso amor por Miu, una mujer mayor que ella, con la que comienza a trabajar. Ambas comparten un viaje y a partir de allí los acontecimientos cambiaran la vida de los tres personajes de la historia.

     En el relato aparece fundamentalmente la idea de soledad y de amor no correspondido. Hay fuertes atracciones y vínculos pero no se consolida ninguna pareja. Como un satélite - "Sputnik" - los seres avanzan, se cruzan y continúan su camino volviendo a separarse. En definitiva, giran sin más compañía que la de ellos mismos "Unos solitarios pedazos de metal en la negrura del espacio infinito que de repente se encontraban, se cruzaban y se separaban para siempre..."

           El final es abierto. Nunca me gustaron los finales abiertos, así que en este punto me hubiese convencido una referencia más concreta a la cual aferrrarme al terminar el libro. Espero que los que lo hayan leído me cuenten cómo lo han interpretado.

           En definitiva, sigo apostando a Murakami.